De dominoes obligados
Una curiosa caja de miradas
con perdurable dominio de pájaros
anhela su beso mental desnudante
Al dormir sus estrellas
sella el enigma de la pupila
que nace de su boca variable
Un desencajante parpadeo
alinea con felpas de noche
el río donde dormirá para siempre
Con lastres de lluvia
al abrigo de su vela imaginaria
reprime el vacío lo incinera
con perdurable dominio de pájaros
anhela su beso mental desnudante
Al dormir sus estrellas
sella el enigma de la pupila
que nace de su boca variable
Un desencajante parpadeo
alinea con felpas de noche
el río donde dormirá para siempre
Con lastres de lluvia
al abrigo de su vela imaginaria
reprime el vacío lo incinera